Mi casablog necesitaba una enchulada, mucho tiempo con la misma vestimenta. Buscando entre el reducido menú de diseños para escoger este me llamó la atención, primero porque no lo había visto en otros blog y segundo por su colorido... había elegido otro pero era muy oscuro que al rato estuve a punto de moler uno de mis antidepresivos y soplar el polvo en la pantalla.
Dicen que por la boca muere el pez y es una dicho del que tuve que aprender casi a porrazos.
El rosado es uno de los colores que más me desagrada, pero ante mi escenario con 2 niñitas (y eso que no están todo los días vestidas de algodón de azúcar) he tenido que tolerarlo más de lo que mi boca se oponía. Tanto Lazy Town con Stephanie bailando y dando saltos los 20 minutos que dura cada capítulo ha logrado que Colomba haya alucinado con ser ella. El merchandising de esta serie infantil cubre una parte considerable de sus juguetes y demases que ya sólo me queda decir "ok" a su tonalidad ñoña. Menos mal que la fiebre por ella va y viene, fue mucho en una época y ahora es de forma intermitente. El vestido con peluca, bolso y zapatillas eran la tenida casera diaria pero por fin ha ido variando en su coloración a lo Luli.
Será por eso que mi abuela siempre dice "no hables muy alto", algo así como el "nunca digas nunca", si al final aunque trato de recurrir a colores alternativos el efecto "princesas" es un fantasma al que debo aceptar a veces, con diadema y todo.
2 comentarios:
jajajaj quedó hermoso!!!!
Ahí anda la Colomba con su corona de princesa todo el día y noche... por lo menos me dijo que yo ea la reina jaja.
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