No sé si sentirme bien o mal, esto de estar una semana sola, sin hijas ni su padre, y no EXTRAÑAR... me he preocupado de YO, disfruto mi soledad la que pucha que he extrañado, me he dedicado a pensar mil cosas, meterme de cabeza en el proyecto, ir al gimnasio, trámites, ver películas, echarme, fumar sin preocuparme del humo ni el olor, sentirme "desocupada" sin aburrirme.
He sacado muchas conclusiones, tratando de dejar la culpa de lado para dedicarme a salir de la pausa en la que me he dejado por 5 años en los que me he dedicado a crear lazos, formar, querer, amar, gritar, soñar, llorar, reír, disfrutar... entre otros muchos verbos que he aplicado según mi concepto de el ser 4. Dándole la importancia necesaria y justa, a veces en demasía oras pocas con egoísmo.
Me dejo ser.
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