DISCRIMINADA

… interesantemente discriminada, así me sentí este medio día.
Mientras caminaba por una transitada calle del sector oriente de la capital, se me acerca una mujer con una carpeta y lápiz en la mano, que con una amable sonrisa y bastante decente a simple vista, tuvimos este diálogo:

Ella: Hola, disculpa, tendrías un poco de tiempo para dar tu opinión sobre publicidad?
Yo: Hola, de qué?
Ella: Bebidas gaseosas… te gustan las bebidas?
Yo: Sí, bastante
Ella: Podrías dar tu opinión ahora en un almuerzo hoy sobre bebidas, será poco rato?
Yo: Sabes, soy Publicista.
Ella: Ah, ok… no me sirves.
Yo: …
Ella: Gracias de todas maneras.
Yo: Chao
Ella: Chao

Después de que cada una siguió su vida, me fui pensando en la situación, primero por la coincidencia, segundo preguntándome si tendré cara de "opinión" o de tener mucho tiempo libre, después fue cambiando mi pensamiento y quizás que intención extraña había detrás de la amable sonrisa y la casualidad me salvó de salir en la cuenta de la luz como persona desparecida, venta de órganos, trata de blancas, cámara indiscreta o quién sabe qué cosa.

Dejando de lado la persecución posterior, después de despedirnos con la señorita sico-encuestadora caminé con una leve sonrisa por la discriminación y por sentirme satisfecha escuchándome realmente decir lo que soy, lo que me gusta ser.